
13 Ago Síndrome del ojo seco: qué es, síntomas y tratamiento
El síndrome del ojo seco es una alteración que se produce en la superficie de la córnea y la conjuntiva por falta de lágrima o porque ésta es de mala calidad. Como consecuencia, la superficie del ojo no está bien lubricada. Es un síndrome que lo padece un 20% de la población y le afecta casi al 100% de las personas con edad avanzada.
Índice
«Falta de lágrima»
Causas del ojo seco
Las principales causas que provocan este síndrome del ojo seco son las siguientes:
- Cambios hormonales
- El envejecimiento, se atrofian las células que generan la lágrima de forma constante y aquellas que determinan la composición de la película lagrimal.
- Alteración del parpadeo. Por ejemplo, en situaciones de máxima concentración (lectura o frente al ordenador, por ejemplo) es posible que no se parpadee lo suficiente.
- Las lentillas también favorecen el ojo seco.
- Encontrarse en un ambiente seco o con excesivo viento o abusar del aire acondicionado.
Síntomas del ojo seco
Los síntomas que podemos sufrir son los siguientes:
- Visión borrosa
- Sensación de quemazón o irritación
- Sensación de tener arena dentro del ojo
- Pesadez de los párpados
- Ojos rojos
Si sufres estos síntomas y tienes dudas de padecer este síndrome acude a tu clínica de oftalmología de confianza. La detección y tratamiento precoz resultan esenciales para la mejora y prevención del daño ocular.
¿Cómo podemos prevenir el síndrome del ojo seco?
Una de las medidas fundamentales de prevención es mantenerse alejado de ambientes secos y de los elementos que irriten los ojos como pueden ser el humo del tabaco y el aire acondicionado.
El parpadeo como ya hemos comentado anteriormente es fundamental y ayuda a prevenirlo, aunque sabemos que es algo difícil de controlar.
¿Cuál es el tratamiento del ojo seco?
El tratamiento es sencillo y el uso de lágrimas artificiales ayudará a eliminar cualquier molestia ocasionada por este síndrome. Se recomienda usarlas de 2 a 4 veces al día.
Cada caso es distinto y es importante que acudáis a revisiones oftalmológicas periódicas.